Las obras que son categorizadas como las “grandes de la
historia”, tienen una cualidad en común que se repite y que permite darle tal categoría.
Esa cualidad es su existencia atemporal, esas obras que vulgarmente dicen que “pasan
la prueba del tiempo” y parecen perfectas para cualquier época en la que se
encuentre existiendo. La razón para que esto se dé es variada, pero
principalmente se debe a que tocan el tema que por más que nuestra cultura
evolucione de las maneras más insólitas, no va a poder eliminar… nuestra condición
como humanos.
Durante los felices años 20 Estados Unidos pasó por una época
de gran cambio y abundancia. Los hijos de la primera guerra mundial festejaban con
la prosperidad de la victoria y dentro de los jóvenes que en algún momento
participaron en la guerra, salieron
varios artistas a los que Hemingway famosamente llamo “Generación
Perdida”. F. Scott Fitzgerald fue uno de
ellos y con su novela The Great Gatsby, representó una época. Tristemente, el relato
sobre la decadencia del sueño americano no le dio a Fitzgerald su fama en vida
sino que, tiempo después de su muerte es que se le reconoce su gran aporte.
En cine se ha adaptado varias veces la novela, siendo la más
famosa de estas la protagonizada por Robert Redford y Mia Farrow, con un guion
escrito por el ya entonces famoso Francis Ford Coppola. Contenía buenas
actuaciones, pero la película solo armaba una grande, poco conmovedora, monótona
narración.
Después de otra cinta para televisión y otros homenajes
varios, llega el proyecto de una nueva adaptación a manos de Baz Luhrmann,
conocido por sus éxitos como la modernización de Romeo+Julieta, el gran musical
Moulin Rouge! y su más reciente Australia. Un director que se caracteriza
primordialmente por su estilo visual, colorido, vistoso y grandilocuente. Jamás
hubiera pensado en él como primera opción para que tomara las riendas de la adaptación,
pero no deja de ser alguien con
interesante visión.
Pero independientemente de quien adaptara la obra queda
claro que es un libro no fácil de traspasar al cine. No porque su hilo
argumental fuera complicado, sino porque la obra se centra más en las reflexiones
que su protagonista Nick Carraway tiene sobre la trama en la que se ve
envuelto. Luhrmann hizo un buen intento, considero que incluso mejor que las
anteriores versiones, pero simplemente no logra dar la profundidad necesaria
que requiere la obra que al mismo tiempo debe mantener una decente experiencia cinematográfica.
Leonardo DiCaprio interpreta con la fenomenal habilidad que
lo caracteriza a un millonario excéntrico y anfitrión de grandes fiestas
llamado Jay Gatsby, que tiene como meta de vida estar con su amada Daisy Buchanan
quien le da vida una Caery Mulligan que siento le hizo falta imprimir un poco
de más de alma. Desafortunadamente para Gatsby, Daisy ya está casada con otro
millonario que encarna un muy desenvuelto Joel Edgerton, que con gran actitud
hace viva las infidelidades de Tom Buchanan. Todo esto lo vemos por los ojos
del verdadero protagonista Nick Carraway, quien recuenta la trágica historia,
llena de excesos, fiestas, y la ilusión de creer poder controlar la vida misma.
Carraway empieza con un gran entusiasmo sobre la vida, pero al final se entera
de que esta echa la supuesta felicidad en la riqueza y su retrato fue
excelentemente interpretado por Tobey Mcguire.
El director apostó por una puesta de escena bastante
colorida y vibrante como es de su costumbre. Fue desafortunado para mí encontrarme
con un gran contenido de CGI (imágenes generadas por computadora) y había momentos
en que extrañe que una cámara filmara un lago de verdad en vez de un escenario
salido de un videojuego. Hay momentos en que las imágenes están diseñadas nada más
para “alegrar el ojo”, pero realmente no aportan narrativamente. Por otro lado,
hubo momentos en que Luhrmann jugó con ciertos efectos de edición para crear
escenas que me cautivaron y que fueron efectivas al mostrar de manera surrealista los estados emocionales del protagonista.
Ya en la segunda mitad de la película, la misma trama obliga
al aspecto visual ser más conservador. En una magnifica puesta de escena donde
los personajes se desvelan con su verdaderas intenciones podemos ver el poder
del material en que la cinta está basada, pero por alguna irritante razón el
señor Luhrmann olvidó la cátedra de lenguaje cinematográfico 101. Entiendo que
quisiera transmitir de alguna forma la prosa y la literalidad física de la obra
misma, pero falló al poner frases flotantes en medio de la pantalla, transcribiendo
lo que la narración del personaje de Mcguire ya nos decía. Como una pobre presentación
de PowerPoint.
La intención de Luhrmann es apreciable. El querer presentar
esta historia para la actualidad, para la sociedad de hoy en día, es un movimiento
interesante y con el que se le perdonan algunos anacronismos como la música, el
vestuario y el ambiente como tal, que no son de la época pero que nos permiten
entender como miraban las cosas le gente de entonces. Lamentablemente lo único que
permite realmente mantener de pie a la cinta es el excelente material en el que
está basada. La historia que escribió Fitzgerald en aquellos años sigue siendo
relevante hoy en día como reflejo de
nosotros como personas y sociedad. La película siguió la historia, pero prefirió desviarse
por el entretenimiento visual a expensas de sumergirse más adentro en los temas
humanos de la novela.
Agregadores de reseñas
Calificación: 3 Luces verdes de 5 (En serio, una presentación de PowerPoint)
¡Lo que son las opiniones!
ResponderBorrarYo pensé que lo peor de la película fue Tobey Mcguire, el Nick Carraway mas sobre actuado del mundo, creo que la única razón por la que su personaje se sostiene es por la excelente obra en la que esta basada la película, como tu bien mencionaste. En cambio, aprecie mucho lo visual, me pareció una interpretación que bordeaba en lo ostentoso y en resaltar los excesos que muestra el libro.
En general... me pareció un(bonito) buen intento.
Muy buena crítica, por cierto. Felicitaciones.
Me alegra que te gustara y si, es una opinión (no puedes estar de acuerdo con todo el mundo, pero... ¡Esa es la gracia!). El visual estuvo, de hecho, espectacular (a pesar como dije del CGI) pero siento que a veces se le olvidaba que tenia que contar una historia.
BorrarDe todas formas gracias por leer y ojala sigas leyendo :)